Reseña ~ Trauma ~ Javier Núñez

Poco después de divorciarse de su mujer y de mudarse a un pequeño apartamento, Santiago empieza a tener extraños sueños recurrentes en los que recorre un bosque. En cada nuevo sueño avanza un poco más y, finalmente, descubre pistas relacionadas con su infancia. Al mismo tiempo, una figura sobrecogedora, cubierta de ramas y hojas, ha aparecido en su casa y parece querer transmitirle un mensaje.
Todas sus pesquisas confluyen en un claro, en torno al solitario olivo que alguien plantó allí y en el que sus amigos y él estuvieron reuniéndose durante la primavera y el verano de 1993. Para jugar, y también para crecer y hacer cosas de mayores. Tras reencontrarse con ellos, logra comprender cuál es la situación de cada uno. Pero no dispone de mucho tiempo. El pasado ha vuelto para reclamar justicia y hay vidas en juego. 

La suya, sin ir más lejos.

Imagen de Pinterest (x)

No sabía de la existencia de esta novela hasta que leí algunas reseñas en varios blogs hace ya unos cuantos meses, y reconozco que en ese momento me llamó un montón la atención y me produjo curiosidad por esos sueños de los que se hablan en la sinopsis, así que en cuanto se cruzó en mi camino el mes pasado —gracias al autor— le di la oportunidad que se merecía y desde luego que no ha estado nada mal :)

La novela se nos presenta narrada en tercera persona desde el punto de vista de  Santiago, un hombre que acaba de divorciarse y que regenta una tienda de electrodomésticos de hogar. Su vida transcurre con aparente normalidad excepto cuando llega la hora de dormir, momento en el que unos extraños sueños se apoderan de su mente. Por si esto no fuera poco, y sin tener la más remota idea del significado de esos sueños, con el paso de las horas va descubriendo cosas que hacen que la situación se vuelva aún más extraña e inverosímil y es por eso mismo que se aventura a buscar a su grupo de amigos de la infancia que por alguna razón aparecen en sus sueños junto al olivo que frecuentaban hace muchos años y que ha sido testigo de tanto. Santiago cree que la clave reside en el olivo, ¿pero qué pretende? ¿Qué significan esos sueños?

Los personajes secundarios que intervienen en la novela son muy escasos, siendo los amigos de Santiago los únicos personajes que aparecen: Nuria, Mario y Juan Carlos. Con respecto a ellos, decir que en general están bien trabajados y a grandes rasgos he podido conocerles lo suficiente e incluso empaticé con ellos, quizá por su situación personal o por el pasado de alguno de ellos, aunque con quien más empaticé fue con Santiago, el protagonista, que me transmitió a la perfección sus miedos e inquietudes y su nerviosismo ante la situación que se le plantea. Personalmente, no sabría decir cuál habría sido mi reacción al respecto, pero supongo que hubiese reaccionado igual que Santiago o incluso peor :')

«Cuando uno alcanzaba la edad adulta se ponía en marcha una reacción en cadena de pérdida de seres queridos en un flujo más o menos constante. Era el precio de la vida, pero nadie se acostumbraba a ello. Cada nueva muerte era una nueva flecha en el costado. La herida sangraba y, en la mayoría de las ocasiones, cicatrizaba. Pero siempre terminaba por volver a abrirse».

La trama, por su parte, me pareció un tanto desconcertante al principio, pero a medida que avanzaba la novela me fue pareciendo más original y lo mejor de todo era que no tenía ni la menor idea de adónde se dirigía, por lo que la sorpresa, la intriga y el misterio estuvieron muy presentes de principio a fin, algo que me gustaría destacar como algo positivo. 

Estamos ante una de esas novelas en las que la información va llegando con cuentagotas, y aunque no se caracterice por tener grandes dosis de acción a mí me mantuvo enganchada en todo momento y las incógnitas del «caso» me incitaban a seguir leyendo; al igual que Santiago, yo también quería descubrir el significado de esos extraños sueños y a dónde le llevarían, quería saber qué estaba pasando y por qué. En definitiva, quería respuestas y aunque estas se hicieron de rogar, mereció la pena descubrirlas casi al final *-*

Con respecto a si me ha parecido o no predecible la novela, lo cierto es que no sabría qué deciros porque sí que sospechaba en qué terminaría una de las incógnitas de la trama, pero de la otra gran incógnita no sospeché en absoluto hasta las últimas páginas, hasta que llegué el mismísimo epílogo. Aun así, diría que estamos ante una novela impredecible y que al menos a mí ha logrado sorprenderme en muchas ocasiones.

La pluma del autor me ha gustado. Javier Núñez tiene un estilo sencillo, cercano y sin florituras ni extensas e innecesarias descripciones, directo y ameno que hace que el ritmo de lectura sea ágil, por lo que para mí fue una lectura entretenida y rápida de leer. Además, tiene un buen equilibrio entre narración y diálogo y los capítulos son breves, estando la novela dividida en tres partes bien diferenciadas y teniendo cada una sus propios capítulos.

Y ya, para terminar, me gustaría hablaros un poco del final, que si bien me pareció un tanto breve y precipitado, reconozco que me sorprendió y gustó a partes iguales. Digamos que me convenció, especialmente por las explicaciones tan esperadas y necesarias que se dan en el epílogo, así que sí, me di por satisfecha. Si los sueños de Santiago os han llamado la atención y os han creado tanta curiosidad como a mí en su momento, os animo a que leáis esta novela —que, además, es cortita— y descubrís el significado encierran. Estoy segura de que no os dejará indiferentes :) 

/5

~ Gracias al autor por el envío del ejemplar ~

Y vosotros, ¿habéis leído esta novela? ¿Os gustaría leerla? Contadme :)

¡Nos leemos en la próxima entrada!