Curioseando... #68

Sección semanal en la que os traeré una pregunta relacionada con los libros, la lectura, curiosidades y otros temas de interés.

¡Hola!

¿Qué tal estáis? Espero que muy bien y que no estéis sufriendo demasiado con esta ola de calor :') Por culpa de esta, mis ganas de leer se han reducido a menos mil, pero bueno... tengo otros entretenimientos para ocupar en mi tiempo libre, así que no me quejo. Ya vendrán tiempos mejores xD

Y hablando de tiempos mejores, hoy he decidido traeros una nueva entrega de esta sección que tanto me gusta aprovechando que me ha venido la inspiración sobre un tema en concreto del que me gustaría hablaros y del que me gustaría saber vuestra opinión. Dicho esto, en esta ocasión me gustaría saber...
 

Seguramente os hayáis hecho eco de las "polémicas" que han ido surgiendo estos últimos meses, tanto en Instagram como en Blogger, relacionadas sobre si merece la pena o no mantener un blog (en este caso literario). ¿Realmente merece la pena echarle tantas y tantas horas de esfuerzo y trabajo a un hobbie que puede dejar de gustarnos en cualquier momento?

Para mí, la respuesta sería un sí rotundo. Corregidme si me equivoco, pero seguramente a la mayoría de los blogueros literarios se nos ha pasado por la mente en algún momento cortar con todo porque quizá estábamos atravesando un parón lector importante o porque no veíamos por ningún sitio la respuesta que espérabamos por parte de nuestros seguidores. ¿Os ha ocurrido? Porque a mí sí, y en más ocasiones de lo que me hubiese gustado, pero a día de hoy (y después de casi cinco años) sigue siendo más importante para mí la parte de "hobbie" que la de "trabajo" aunque, obviamente, mantener un blog siempre requerirá un equilibrio entre ambos.

En innumerables ocasiones me he preguntado "¿Y tener un blog para qué?" "¿Me cansaré de él algún día?". Aún me sorprendo cuando veo que algunos blogs celebran su noveno o décimo aniversario y es entonces cuando pienso que a mí también me gustaría llegar a ese punto, porque no importa si no tenemos tantos seguidores o comentarios como pensábamos que íbamos a tener en un primer momento porque, al fin y al cabo, esto es un hobbie y nada más debería importar, ni siquiera las rachas en las que algunos empiezan a decir que los blogs literarios están acabados. Porque un blog nunca tendrá, bajo mi punto de vista, fecha de caducidad y en todo caso sereremos nosotros, sus administradores, quienes la elijamos.

Y con respecto a este tema, hay algo que me da mucha pena y me produce nostalgia: los blogs que desaparecen. Llevo ya casi cinco años en Blogger y desde entonces he descubierto infinidad de blogs que, por unos motivos u otros, me han aportado algo. He llegado a conocer a bastante gente y con algunos he llegado a trabar una especie de amistad, o incluso sin llegar a nada cercano a eso he sentido que conocía a quienes se escondían detrás de un blog. Y entonces, un día cualquiera desaparecen, tanto del blog como de redes sociales, y no sabes nada más de esas personas a las que habías tomado aprecio ni de esos blogs en los que solías comentar casi a diario :(

Algunos blogs cierran porque sus administradores empiezan a estudiar o a trabajar (cosa que me parece absolutamente normal y razonable porque también hay que saber establecer prioridades llegado el momento) y otros simplemente desaparecen porque piensan que su trabajo no está lo suficientemente valorado y creen que porque poca gente les lee o comenta ya no merece la pena seguir adelante con su hobbie. A mí esto me da mucha pena; me da pena ver cómo se va apagando en algunos la ilusión con la que inauguraron su blog y se van sin hacer ruido =/ 

Yo creo que hasta la fecha mi blog no ha sufrido ningún parón aunque, como ya digo, en alguna ocasión he llegado a replantearme todo esto y me han surgido dudas, pero no ha llegado a ser nada serio y aquí sigo, sin pensar que esto es un trabajo o una obligación. Además, por suerte o por desgracia, ni estudio ni trabajo desde hace un par de años o más, así que en este aspecto el blog sigue siendo para mí un hobbie aunque algunas veces no me apetezca sentarme frente al ordenador a escribir una reseña o preparar entradas como esta. Pero aun así sigo pensando que merece la pena, así que tampoco lo tomo como algo demasiado negativo.

Así que bueno... para mí, el blog es algo así como una vía de escape a mi día a día y a mi exceso de tiempo libre (que muchas veces no es tan genial como parece, aunque muchos no lo creáis xD) y como una forma de conectar más directamente con una de mis grandes pasiones y disfrutarla aún más. Gracias a todo esto he descubierto infinidad de novelas que a día de hoy son mis favoritas y he conocido a gente maravillosa con la que comparto opiniones y gustos, y con esto me quedo. Aún no me he planteado ponerle fecha de caducidad al blog porque no sé dónde estaré mañana, pero sí espero poder seguir con él durante muchos años más porque podría decirse que sigo teniendo la misma ilusión que tenía el primer día a pesar de los vaivenes y frustraciones que me han ido surgiendo desde entonces y hasta hoy.

Me gustaría que esta entrada sirviera de alguna manera a aquellos que están pasando por un momento de bajón bloguero y se están planteando abandonar o cerrar su rincón por falta de ganas o motivación, porque creo que nunca deberíamos dejar a un lado algo que de verdad nos llena y nos regala tantas y tan buenas cosas aunque, de primeras, cueste verlas, porque todo llega con paciencia, esfuerzo y ganas :)

Y ahora me gustaría saber vuestra opinión, me gustaría saber qué os aporta vuestro blog, qué os hace seguir teniéndolo activo o qué os impulsa a seguir publicando entradas ^-^

¡Nos leemos en la próxima entrada!