Reseña | La joven que aprendió ~ S.S.G. Danvers

El viaje fue solo el principio.
El cuento de hadas continúa.
Melania, declarada traidora, es ahora una de las fugitivas más buscadas del reino. Pero los dioses son caprichosos y le harán tomar un camino que ni ella esperaba. Melania aprenderá lo que es vivir en el que va a ser su reino. Reirá y llorará, perderá y ganará, pero sobre todo conocerá lo retorcido que puede llegar a ser el destino, y es que lo que en principio pudiera parecer un revés, resultará ser lo que ella siempre había deseado.
Jamás, jamás en la vida dejaría que nadie, ni en este mundo ni en el mío, me volviera a poner la mano encima sin mi consentimiento.

¡Qué ganas tenía de continuar con esta trilogía! Leí su primera parte, La chica que viajó, el año pasado y la disfruté muchísimo, así que en cuanto Silvia, su autora, me ofreció organizar una lectura conjunta no pude decir que no porque era una muy buena oportunidad para leerla de una vez por todas. Y aunque no he seguido a rajatabla las fechas porque me organizo tan bien nótese la ironía que se me juntaron varias lecturas al mismo tiempo, no la he perdido de vista en ningún momento y he podido disfrutarla y me ha gustado tanto como su primera parte jiji

La novela se nos presenta narrada en primera persona desde el punto de vista de Mel, nuestra protagonista. Al final de la primera parte, vemos cómo Mel viaja hasta un pueblo del sur donde encuentra trabajo en una tienda por y para inmigrantes cuyos dueños resultan ser también españoles, y es en este preciso momento cuando arranca esta segunda entrega, aunque antes encontraremos un prólogo narrado en tercera persona por Vánel, un personaje secundario que tendrá gran relevancia a lo largo de la novela y se convertirá en un pilar muy importante para Mel. Y hasta aquí puedo leer porque no me gustaría spoilearos.                                                                                                                                                      Los personajes secundarios que intervienen en la novela no son nada numerosos, por lo que no tuve dificultad alguna para diferenciarlos. En realidad, solo me quedaría con Vánel, Beltane y Gertie (sus dos hijos) porque aunque hay algunos más que aparecen de vez en cuando en la novela, no sabría decir si tendrían la categoría de personajes secundarios pero, para mí, esos tres han sido los más relevantes e importantes. 

Obviamente, al ser tan pocos los principales personajes secundarios, he podido conocerles muy bien y en mi opinión están muy trabajados y pulidos y he podido empatizar con ellos desde las primeras páginas, aunque Beltane... Ay, Beltane, qué malo eres a veces xD Vánel me ha parecido un personaje de los pies a la cabeza; aporta cordura y serenidad al grupo y es pacífico como el solo. Tiene un corazón enorme y aunque ya me cautivó desde el principio, me ganó por completo cuando reveló su historia, su pasado. Gertie es una niña que aún tiene que recorrer un largo camino para crecer, pero diría que es bastante madura y sensata teniendo en cuenta la edad que tiene. ¿Y Mel? ¡Menuda evolución sufre en esta segunda entrega! Me ha sorprendido, y para bien, porque tiene que enfrentarse a un sinfín de situaciones que ni de lejos esperaría tener que enfrentarse, pero dadas sus circunstancias no le queda más remedio, aunque siempre cuenta con apoyos y ayuda. Mel madura y crece, ya no solo como persona, y adquiere experiencia en distintos ámbitos; en resumen, se hace valer.

La trama, por su parte, la he disfrutado muchísimo. Si ya la primera parte no me pareció nada introductoria pese a ser un inicio de trilogía, esta segunda entrega no se queda atrás. ¡Qué de cosas llegan a pasar! No hay capítulo en el que no pase algo que den más ganas aún de seguir leyendo, en serio. He tardado bastante tiempo en leer la novela, lo admito, pero no precisamente por su extensión o porque no me enganchase porque, de hecho, me ha mantenido enganchada de principio a fin.                                                                                                                  Tenemos grandes dosis de acción e intriga y algún que otro giro argumental —inesperado por mi parte—, tenemos magia, música, enfrentamientos, elfos, magos... ¡Tenemos un poco de todo! La trama sencilla no es, desde luego, pero tampoco es densa ni compleja, así que se puede seguir fácilmente y para personas como yo, poco acostumbradas a leer fantasía, esta trilogía nos viene como anillo al dedo porque, además, se hace disfrutar por ella misma. 

Esta segunda parte también viene cargada de detalles que la hacen sumamente visual gracias, en gran parte, a las numerosas descripciones aportadas por la autora, por lo que es muy fácil transportarse junto a los personajes a los distintos paisajes y escenarios que ellos mismos pisan y sabéis que esto es algo que suelo destacar muy positivamente de este tipo de novelas. Y por motivos que no voy a desvelar para no spoilear, diré que esta vez el romance escasea pero, a decir verdad, tampoco lo eché en falta debido a la gran cantidad de cosas que pasan, así que no hay lugar para el aburrimiento jiji

La pluma de la autora ya la conocía, obviamente, así que no me ha supuesto mucha sorpresa y/o cambio. Sigo pensando que tiene un estilo muy cuidado y que tiene mucho potencial y futuro como escritora porque al menos a mí me convence, y mucho, su forma de escribir. Tiene un estilo tan descriptivo como necesario y se ciñe a lo realmente importante; además, logra un buen equilibrio entre narración y diálogo, aunque reconozco que a veces me agobiaba leer párrafos tan largos por muy enganchada que me tuviese la novela.                                                                                                                      Ahora bien, reconozco que los capítulos no son nada largos, pero debe ser que el tamaño de la tipografía en sí es más pequeño de lo que acostumbro a leer y eso, unido a los párrafos largos que de vez en cuando encontraba, hizo que el ritmo de lectura se me hiciese algo pausado pero, obviando esto, en realidad la historia no tiene un ritmo precisamente lento por lo que antes comentaba de que pasan muchas cosas. Simplemente ha sido ese el único motivo por el que ha bajado algo la nota, porque sentía que no avanzaba o, mejor dicho, sentía que no avanzaba tan rápido o tanto como yo quería. En fin, cosas mías xD

Y ya, para terminar, me gustaría hablaros un poco del final. ¡Que ya te vale, Silvia, por dejarnos así! Ese epílogo tan abrupto como inesperado me dejó boquiabierta durante unos minutos y aún soy incapaz de asimilarlo >.< Por las pistas que me has ido dando, sé más o menos hacia dónde se dirigirá la historia en la tercera y última parte, pero necesito respuestas, ¡y muchas! *-* Independientemente de esto, los últimos capítulos me hicieron sufrir mucho, por nuestros personajes, pero también los disfruté y me engancharon un montón, así que estoy deseando ponerme ya con "La mujer que venció" porque estoy segurísima de que será un gran cierre de trilogía ^-^ ¿Qué me decís, os animáis a leerla vosotros también?

/5

~ Gracias a la autora por el envío del ejemplar ~

Y vosotros, ¿habéis leído esta novela? ¿Os gustaría leerla? Contadme :)

¡Nos leemos en la próxima entrada!