Una noche en París. Dos caminos entrelazándose.No hay nada más eterno que un encuentro fugaz.Cuando Rhys y Ginger se conocen en las calles de la ciudad de la luz, no imaginan que sus vidas se unirán para siempre, a pesar de la distancia y de que no puedan ser más diferentes. Ella vive en Londres y a veces se siente tan perdida que se ha olvidado hasta de sus propios sueños. Él es incapaz de quedarse quieto en ningún lugar y cree saber quién es. Y cada noche su amistad crece entre emails llenos de confidencias, dudas e inquietudes. Pero ¿qué ocurre cuando el paso del tiempo pone a prueba su relación? ¿Es posible colgarse de la luna junto a otra persona sin poner en riesgo el corazón?
Una historia sobre el amor, el destino y la búsqueda de uno mismo.
Hoy vengo a hablaros de mi primera lectura de junio y mi última decepción literaria 😐 No tenía muchas expectativas puestas en esta novela porque, a decir verdad, tampoco le había echado mucho el ojo y había leído opiniones bastante dispares, pero aprovechando que mi gran amiga Rocío me propuso organizar una lectura conjunta entre nosotras, a la que se unió mi tocaya, pues no quise dejar pasar la oportunidad de leerla porque ya se sabe que leer en compañía es mejor que leer en soledad jiji Y bueno..., dicen que lo que mal empieza, mal acaba, así que no, no he disfrutado ni me ha gustado «Nosotros en la luna» 😅
La novela se nos presenta narrada en primera persona y de forma intercalada por Rhys y Ginger, nuestros protagonistas. Él tiene veintiséis años; ella, veintiuno. Ginger lo acaba de dejar con su novio y ha cometido la locura de comprar un billete de avión dirección París, y es en la estación de metro donde conoce a Rhys por casualidad, quien, a su vez, no duda en ofrecerle una rápida visita guiada por la ciudad. A partir de ese momento, y a pesar de que cada uno tiene que volver a su ciudad, empiezan una relación de amistad que poco a poco irá ganando solidez gracias a los correos electrónicos que intercambian casi cada día.
Si os soy sincera, ni me han gustado ni he empatizado o simpatizado con los protagonistas. Me han parecido más sosos que un pan sin sal y me han aburrido tanto como ver crecer el pasto en mitad del campo. Si a eso le añadimos que Ginger y Rhys son tan sumamente diferentes que sus conversaciones son tan aburridas como las mías con mi vecina del tercero (con quien nunca he hablado), pues imaginaos el panorama tan encantador para una novela de casi quinientas páginas 😬
Los personajes secundarios apenas tienen relevancia y por suerte son pocos. Si acaso me quedaría con Dona, la hermana mayor de Ginger, que me ha gustado mucho más que la propia protagonista a pesar de lo poco que aparece. Que no haya empatizado con los personajes o no me hayan caído bien no quiere decir que no estén bien trabajados, porque tampoco es el caso y lo cierto es que se llegan a conocer bastante bien, pero si uno de los pilares de la novela se tambalea, el resto caen como fichas de dominó tarde o temprano.
«Es imposible saber cuándo conocerás a esa persona que pondrá de golpe tu mundo del revés. Sencillamente, sucede. Es un pestañeo. Una pompa de jabón estallando. Una cerilla prendiendo».
La trama no es nada del otro mundo y, además, es predecible de principio a fin, excepto por un par de cosas que pasan en los últimos capítulos que no esperaba y me sorprendieron bastante, por lo que, en mi opinión, estamos ante una trama sencilla, monótona e insulsa, muy pausada y lineal. Como ya digo, la novela en general me aburrió bastante, pero lo que más me aburrió, sin duda alguna, fueron los emails.
La novela tiene 119 capítulos y hay muchísimos (demasiados) donde solo hay correos electrónicos donde los protagonistas intercambian información de su día a día y poco más, e incluso hay correos electrónicos de apenas una línea (?) Si al menos aportasen algo a la trama principal pues no me quejaría, pero es que la gran mayoría solo aportan relleno. Vamos, creo que a la novela le sobran una barbaridad de páginas y perfectamente se podría haber contado lo mismo en doscientas páginas o un poco más, pero bueno... Con deciros que, exceptuando los últimos capítulos, que me gustaron bastante, solo me gustaron dos o tres cuando llevaba leído el 80% de la novela. Un desastre... 😐
«Porque no me imaginaba haciendo aquello con nadie más. No me imaginaba mirando a ninguna otra chica embobado mientras le grababan en la piel las ganas de dejar de tener siempre los pies en el suelo, de mirar más alto, de intentar tocar la luna».
Con respecto al romance, decir que en ningún momento me lo creí porque me pareció demasiado precipitado e instantáneo, es decir, un instalove de los de toda la vida, solo que mal planteado y nada justificado. Si a eso le sumamos que no me han convencido los protagonistas, pues normal que no haya disfrutado el elemento principal de la novela. Lo dicho, fichas de dominó... 😂
Y hablando de estos, ya comentaba antes que la novela cuenta con 119 capítulos muy breves y está dividida en cinco partes bien diferenciadas cuyos títulos son tres palabras clave que nos dan pistas sobre lo que encontraremos en cada una de ellas. A decir verdad, a mí me parecieron un poco spoiler estas palabras, pero para gustos los colores (?)
Y ya, para terminar, deciros que el final no me convenció del todo. Confieso que las últimas páginas me gustaron, al menos un poco más que el resto de la novela, pero no fue suficiente para mí y quizá esperaba más de la historia en general y del final en particular, pues éste queda un poco vago o abierto, al menos para mi gusto, aunque se intuya perfectamente lo que ocurre en el epílogo. Lo dicho, me he llevado una decepción enorme con esta novela, quizá porque esperaba encontrar una historia tan emotiva y bonita como la de Alaska, pero nada que ver... Esta historia no ha sido para mí, pero habrá otras, estoy segura 😌
2/5
Y vosotros, ¿habéis leído esta novela? ¿Os gustaría leerla? Contadme :)
¡Nos leemos en la próxima entrada!
![](https://i.ibb.co/b6PrWxS/separador-blog.png" alt="separador-blog.jpg)
